El Festival Teatro Gayarre programa este martes, 24 de mayo, a las 20 horas, el espectáculo Gardenia, de Les Ballets Contemporáins de la Belgique, cuyo nexo es cabaré de travestidos, con música de Ravel, Puccini o Judy Garland, y un singular grupo de actores, personas jubiladas que alguna vez se vistieron de travestis en su juventud. El resultado es una obra «muy conmovedora».

Así lo ha destacado este lunes en rueda de prensa en Pamplona la creadora de este espectáculo, la artista transexual Vanessa van Durme, quien ha explicado que la idea de poner en marcha Gardenia surgió al ver la película Yo soy así, un filme que trata del cierre de un cabaré en Barcelona.

El espectáculo, dirigido por Alain Platel, pretende «ir más mucho allá del tema del travestismo» para «hablar de la vida», según Van Durme. Para ello, la artista ha reunido a un singular grupo de actores, compañeros de su juventud ya jubilados que en algún momento de su vida se vistieron de travestis. Su objetivo, ha puntualizado, era buscar la «naturalidad» y evitar las «artimañas» que pueden tener los actores profesionales.

Esta apuesta, ha resaltado, era «arriesgada», pero, finalmente, los protagonistas han resultado «encantadores a la hora de transmitir el espectáculo». «Estas personas mayores se sienten bien, son felices en su sala de fiestas Gardenia», ha afirmado. En contraposición, en este elenco participa un hombre joven, que, curiosamente, «es el único que transmite tristeza», ha señalado la artista. La razón, ha añadido, queda para el público.

Estos actores, según Van Durme, «no actúan, se limitan a estar ahí». Así, ha asegurado que transmiten sentimientos «sólo con su presencia» y «reflejan lo que son los actores en este tipo de cabarets». «Son frágiles y, a la vez, conmovedores», ha valorado.

El espectáculo, con Frank Van Laecke como director teatral, se compone de una serie de escenas coreografiadas en cadena y alterna frenesí, pausa, barroquismo y desnudez minimalista. El número final sorprende con su apoteosis de plumas, alfombra roja y escaleras para que desciendan los hombres mayores, transformados en mujeres espléndidas. A este respecto, Vanessa Van Durme ha destacado que «esos collages permiten al público entender el contenido» del espectáclo.

En cuanto a la música, la artista ha explicado que la obra «mezcla un montón de estilos y autores». Además, ha resaltado que el Bolero de Ravel acompaña la escena de «la metamorfosis, el cambio de hombre a mujer».