La Escuela Navarra de Teatro estrena el viernes 23 de mayo la producción propia Idiotas contemplando la nieve, de Alejandro Ricaño, un joven autor que propone «una mirada absolutamente actual a la realidad de su país», México, que bien se puede trasladar a estas latitudes, y que han codirigido Javier Pérez Eguaras y Fuensanta Onrubia. La obra se representará también los días 24, 25, 29, 20 y 31 de mayo y 1 de junio de la mano de seis intérpretes que dan vida a 17 personajes, «una galería de idiotas en el que el menos tonto es el axolote», una especie anfibia autóctona que permanece en estado larvario toda su vida, regenerando sus órganos y sus miembros constantemente y que juega un papel simbólico especial en la historia.

Idiotas contemplando la nieve apuesta por la crítica, pero también por la esperanza, ya que aunque presenta a una serie de personas capaces de destruir a sus seres queridos por una cafetera de diseño, son capaces de calmarse ante la irrupción de un fenómeno de la naturaleza como es la nieve. Y durante ese rato de paz se reencuentran a sí mismos, percatándose de que son mucho más que el dinero contenido en sus bolsillos o la comodidad de sus posaderas.

Alejandro Ricaño visitó la ENT el año pasado y entonces ya demostró su particular modo de contar historias. En opinión de Pérez Eguaras, la puesta en escena de esta producción es «muy complicada», ya que el autor «se salta las normas básicas de tiempo, espacio, puntos de vista, ángulos». «Ha sido un tetris horroroso, pero a la vez lo hemos disfrutado», agrega, y su compañera en la dirección coincide en que se ha tratado de «un reto» y «un gran trabajo de aprendizaje». Eso sí, ambos aclaran que en ningún caso es un montaje experimental; «es fundamentalmente humor áspero y ácido y todo lo que se dice se comprenden a la perfección». En este punto, Pérez Eguaras alaba la «enorme disposición» del elenco, que se ocupa de todos los elementos y cambios que hay durante la representación. Seguramente por eso, porque ha sido duro, pero también revelador, los intérpretes se sienten «gratificados» por su participación en esta propuesta. Cuatro de ellos finalizan este año sus estudios en la ENT y los otros dos lo hicieron en 2013, así que entre todos esperan mover esta obra después de su estreno. «Hemos tenido que ir muy rápido y montar todo esto en 30 días, pero hemos aprendido un montón», apunta Ángel Escalada, que conforma el reparto junto a Imanol Sucino, Zoila Berastegi, Josefina Maggiotto, María Zapata y Oier Zuñiga.

En cuanto al término idiota, Pérez Eguaras indica que se puede entender como ese miembro de «una sociedad deplorable» que ya describía Valle-Inclán en sus textos, o desde esa otra acepción que habla de «esa gente que permanece encerrada sí misma pensando solo en sus necesidades». En definitiva, las palabras escritas por Ricaño «hablan sin tapujos de lo que todos sabemos que existe, pero no nos atrevemos a decir».