CRÍTICA TEATRO

LA FABLILLA DEL SECRETO BIEN GUARDADOAutor: Alejandro Casona. Intérpretes: Petra Armendáriz Ruiz, Marta Escudero Mateo, Lucía Escudero Prat, Luis Miguel Izuriaga y Mirari Perera García. Dirección: Marisol García González. Producción: Los Cadalzos (Olite). Lugar: Olite. Patio de Armas. Fecha: Sábado 25 de julio. Público: 200 espectadores, lleno.

Secreto a voces

Los llenos continuados para las funciones de La Cava, la presencia de público entregado y el eco en los medios informativos confirman la buena salud del Festival de Teatro Clásico de Olite, superada la atonía de la etapa 2008-2011, la de Corpas, marcada por la sinsustancia y falta de ideas, mal disimuladas con mucha farfolla. Entonces, sólo una bajada temeraria del precio de las entradas mantuvo a duras penas el respaldo de la cita veraniega. Por el contrario, los últimos cuatro años bajo la dirección discreta de Yolanda Osés han supuesto el revulsivo que el Festival necesitaba: una programación con elevadas dosis de riesgo y demostrado interés, apuestas sugestivas más allá de hacer blanco fácil con grandes producciones públicas, el atractivo de ofrecer estrenos absolutos en Navarra y un programa didáctico y formativo por fin en coherencia con el programa principal.

Muy atinada fue la sistematización desde el primer momento de la presencia de compañías navarras para su promoción en el “marco incomparable”. Primero se abrió a los grupos aficionados, por la lógica razón de que hace cuatro años el tejido profesional nada podía ofertar relacionado con los clásicos. Fruto de esa labor, para orgullo del sector y del Festival, se ofrecen este año tres propuestas profesionales exigentes, dirigidas por profesionales foráneos solventes y con el punto de ambición artística y comercial necesaria si se quiere trabajar en circuitos externos: Las alegres casadas, Bancarrota y La discreta enamorada. Quién lo iba a decir hace cuatro años.

Como no podía ser menos, sigue habiendo hueco para grupos aficionados, que se crecen ante el reto y amplían la oferta de grandes títulos durante la segunda quincena de julio. Actuó el fin de semana el grupo local olitense Los Cadalzos con una pieza canónica del Retablo jovial de Alejandro Casona. Texto breve, apenas 25 minutos, inspirado en relatos medievales, reescrito con sabiduría por el asturiano para difundir el patrimonio literario entre las clases populares con las Misiones Pedagógicas durante la II República. Aun con su puntito misógino, tiene mucho humor y conecta bien con el público, que se ríe en varios momentos ante las reacciones airadas y salidas de tiesto de la protagonista. Es el prototipo de mujer quejita, maleable y parlanchina, de reacciones explosivas y el marido la utiliza para ocultar el tesoro recién descubierto al ir a cavar a la viña. En vez de ocultárselo, se lo cuenta de forma lo suficientemente disparatada para que lo pregone a los cuatro vientos, sabedor de que ninguno de sus convecinos la creerá.

El matrimonio lleva el peso del sainete, proyecta bien la voz y logra extraer toda la comicidad inserta en sus diálogos, bien aprendidos. Ambos actores cumplen obedientes todos los movimientos que les ha fijado la directora, la tafallesa Marisol García, que ha optado por hacerlos muy vehementes para ayudar a los intérpretes a darles el sentido que reclama su papel. Las otras tres intérpretes también cumplen sobradamente en sus intervenciones. Media hora antes de la función ya había cola ante el castillo. Sus paisanos aplaudieron cálidamente una propuesta bien vestida y amueblada y seguro que agradecieron esta aportación local al festival que da fama a la población.

POR Víctor Iriarte. Publicado en Diario de Noticias el lunes 27 de julio de 2015.