- by Victor Iriarte Ruiz
- on 28th mayo 2007
- in General
- with no comments
"El bazar de la langosta", espectáculo teatral estrella del Festival Teatro Gayarre
El Festival Teatro Gayarre: Otras, Miradas Otras Escenas alcanza su punto álgido con la puesta en escena el martes 29 de mayo (8 tarde) de El bazar de la langosta, el espectáculo estrella de esta segunda edición que concluye el fin de semana próximo (días 1 y 2 de junio) con el Marat Sade de Animalario y Centro Dramático Nacional. La compañía belga Needcompany, liderada por Jan Lauwers, el director y autor de El bazar de la langosta, estrenó este espectáculo en el Festival de Avignon, productor, junto al Teatro de la Villa de París entre otros, de esta obra de teatro multidisciplinar donde se dan la mano la música, la danza y las videoproyecciones.
La trayectoria de Need Company ha venido marcada siempre por la búsqueda de una dimensión internacional de sus trabajos, de ahí que haya adquirido una notable repercusión fuera de su país de origen. El Bazar de la Langosta es una metáfora de la desesperación y la pena profundamente humana y devastadora, y también de la belleza del hombre. Una alucinación que huye de la realidad, una búsqueda de la seguridad humana, una búsqueda del objeto del deseo. Una imagen melancólica, que intenta perdurar en toda su belleza. La compañía belga Needcompany destaca por añadir al teatro todos los medios posibles, entre ellos música, las videoproyecciones y danza.
El bazar de la langosta, estrenada con gran éxito en el Festival de Avignon (Francia) de 2006, describe esa fracción de segundo en la que el dolor lo destruye todo y aparece la idea del suicidio. La acción se centra en Axel y Theresa, un matrimonio que vive atormentado por la muerte de su hijo Alex en un accidente. Tras intentar, sin éxito, una terapia, Axel decide poner fin a su vida allí donde su hijo la perdió. Sin embargo, un acontecimiento inesperado le sucederá al entrar por última vez en su restaurante preferido, El bazar de la langosta. Ahí, y en una fracción de segundo, todo el ritual que había preparado para su suicidio se viene abajo y con ello toda su vida parece estallar.
A partir de este momento, la historia continúa en la mente confusa de Axel mediante relatos que van del delirio a la realidad, de la comedia a la tragedia, de lo grotesco a las consideraciones filosóficas. La tragedia personal de este hombre, trastornado por la pena, se muestra ante los ojos de un mundo en ebullición. Se sucede un torbellino de diálogos nerviosos, de reflexiones absurdas. El siglo XXI se convierte en un punto de inflexión para la humanidad, que vive en un mundo en llamas, en desintegración, sometido a la angustia irracional, el aburrimiento perpetuo y donde los actos desesperados proliferan.
Sin embargo, no todo es oscuridad en este mundo: el humor, la danza y la música se convierten en un contrapeso a la carga generada por los problemas de la sociedad, por su pérdida de la identidad y por el dolor personal.
La historia de Axel y Theresa se cuenta mediante varias miradas como la de la psiquiatra que les trata, Catherine, pero también por parte de dos creaciones de Axel. Como científico especializado en genética, Axel tuvo un gran éxito a la hora de crear dos clones: uno el de un Oso, otro el de Salman: su primer clon humano, una gran hazaña científica pero también un gran fracaso a nivel humano. Su deseo frustrado de convertir a Salman en un sustituto de su hijo provoca, además, una confusión en la identidad de Salman, quien tratará desesperadamente, aunque en vano, de saber quién es.
El bazar de la langosta es una reflexión sobre la identidad, una historia sobre la imperfección y los deseos, que chocan contra la lógica. Los personajes que rodean a Axel y Theresa viven también en un estado de agitación permanente e indefinición y un cúmulo de circunstancias insensatas reunirá a todos en una calle de Flandes, justo delante del Bazar de la Langosta, el lugar de la acción, de la desavenencia y de las coincidencias grotescas.
Coproductores: Festival d’Avignon, Théâtre de la Ville (Paris), Théâtre Garonne (Toulouse), PACT Zollverein (Essen), Cankarjev Dom (Ljubljana), La Rose des Vents (Scène Nationale de Villeneuve d’Ascq), Automne en Normandie, La Filature (Scène Nationale de Mulhouse), Kaaitheater (Bruselas), de Singel (Anvers). Con el apoyo de las autoridades flamencas y del Programa Cultura 2000 de la Unión Europea.
La compañía
Nacido en Anvers (Bélgica) en 1957, Jan Lauwers es un artista multidisciplinar vinculado desde hace veinte años a Need Company.
La formación de Jan Lauwers como cirujano plástico ha sido determinante a la hora de desarrollar un lenguaje teatral propio e innovador. Sus primeras producciones, Need to Know (1987) y Ça va (1989), venían marcadas por una visualidad que ha ido matizándose en beneficio de un mayor protagonismo de la línea narrativa y del desarrollo de una idea central. Esta escritura específica es una característica constante en las obras de su repertorio: Julius Caesar (1990), Antonius und Kleopatra (1992), Needcompany’s Macbeth (1996), Needcompany’s King Lear (2000) y Ein Sturm.
Después de la puesta en escena de Invictos (1991), del monólogo SCHADE / Schade 1992 y de la ópera Orfeo (1993), en 1994 Need Company empieza a trabajar en un vasto proyecto: La trilogía The Snakesong, formada por Le Voyeur (1994), Le Pouvoir (1995) y Le Désir (1996).
Tras el fin de la trilogía, Jan Lauwers crea Caligula según Camus, dividida en dos partes; la segunda fue premio Obie en Nueva York.
En 1999, Jan Lauwers puso en marcha Needlapb, una serie de encuentros profesionales con el fin de promover la presentación de ideas, observaciones y proyectos. Needlapb se presentó en Bruselas, Lovaina, Gante, París, Toulouse, Hamburgo, Turín y Avignon.
Comentarios recientes