La Federación de Teatro Amateur de Navarra (FTAN) denuncia que los 40 grupos que reúne se sienten “estafados una vez más” por el Gobierno de Navarra, y no solo porque el departamento de Cultura les negara el año pasado las ayudas a la celebración de su proyecto principal, la Muestra Navarra de Teatro Amateur, sino porque varios de sus miembros se han implicado activamente en procesos como la elaboración del Plan de Impulso del Teatro y sienten que, visto el documento final, “nuestra voz ha sido ignorada”, ya que no contiene “ni una triste línea sobre el teatro amateur”.

La Federación se manifestó frente al Parlamento en el momento en que allí se leía el mensaje del Día Mundial del Teatro.

La entidad atraviesa actualmente un proceso de debate interno de “varios meses” y que pretende “repensar” la entidad, “para actualizar estrategias y objetivos que hagan frente a los nuevos contextos internos y externos que se están dando”. Entre los objetivos, alejar las tendencias competitivas entre los 40 grupos que ahora la conforman y poner en valor la riqueza asociativa que aportan sus integrantes, pero también hacer “entender” al Gobierno de Navarra lo importante que es el teatro amateur en Navarra.

Creada en noviembre de 2010 con 20 grupos, hoy es el día en que está compuesta por 40 compañías aficionadas. “Vemos necesario repensar la Federación para que toda esa riqueza asociativa se convierta en un valor, sin que eso signifique restar eficacia y unidad”, explican desde la junta, actualmente presidida por Jaime Malón (Zarrapastra), y que completan Ariane Irure (Trapalan), como vicepresidenta, y Rakel Goñi (Teatralis), Miguel Lucas (La madeja), Josu Castillo (La puerta roja), Consuelo Cruz (Habiateatro), Mari Jose Irigoyen (Asimetría) y Miguel Domenech (Juslarrotxa), como vocales.

Uno de los principales desafíos internos a los que se enfrenta la FTAN es que sus componentes no hablen de ella en tercera persona, sino que se involucren y sean conscientes de que solo logrará sus objetivos “en función del grado de compromiso de los grupos”. En estos momentos, el debate es ilimitado y se está examinando la entidad desde la base y en tres direcciones. Por un lado, se trata de analizar el concepto de teatro amateur y la necesidad de la Federación para abordar los problemas que afectan al teatro aficionado de Navarra. La segunda fase se detiene en el hecho federativo y en la tercera “plantearemos cómo organizarnos internamente para alcanzar los objetivos propuestos”. En la práctica, el debate se está llevando mediante el correo electrónico y las redes sociales, aunque también a través de asambleas generales.

DECEPCIÓN CON EL EJECUTIVO. Uno de los temas más complejos de valorar será el referido a la relación entre la FTAN y el Gobierno foral. “La relación con la Administración es equívoca; en petit comité, palmada en la espalda, haciéndonos ver lo bueno y lo necesario que es el teatro amateur, pero, a la hora de la verdad, esas palabras no se contemplan en ningún sitio”, afirma la junta, convencida de que las instituciones están “cediendo a las presiones de algunos sectores del mundo profesional, que ven en el teatro amateur una amenaza a sus intereses”. En ese sentido, la Federación quiere hacer entender al Gobierno foral que “apoyando lo amateur a su vez está apoyando al mundo profesional”, ya que “el 90% del dinero que pasa por nuestras manos va directamente al mundo profesional”. “Es paradójico que decenas de profesionales accedan a ser directores y directoras de nuestras obras y que también ejerzan la enseñanza en taller municipales de teatro y después interpreten que el teatro amateur es una amenaza para su sector”, razonan desde la junta.

Y siguen: “Lo que está claro es que desde un concepto mercantil de la cultura, los profesionales nos perciben como competencia desleal. Para evitar esto, creemos que el Gobierno debería separar claramente las estrategias y las ayudas al teatro”. Y es que, en su opinión, “no es lo mismo una empresa teatral, obligada a competir y a someterse a las leyes del mercado, que el teatro amateur, cuyos objetivos tienen más que ver con la cercanía, el compromiso y la interrelación social”. La junta de la FTAN insiste en que les parece increíble que el Ejecutivo foral “ignore una realidad que mueve a cientos de personas en Navarra, a decenas de grupos, talleres, etcétera, con un potencial de movilización de público enorme y a su vez generador de empleo dentro del mundo profesional, a nivel artístico o a nivel técnico. El teatro amateur tiene un valor de interés cultural y social enorme, y un gobierno que se califica de progreso debería mimarlo”. Y no desoír su voz, como sienten que ha ocurrido después de que varios miembros de la Federación participaran en reuniones del Plan de Impulso del Teatro. “Nos hemos sentido estafados, dado el resultado de dicho plan, es obvio que nuestra voz ha sido ignorada”.

En estos momentos, la Federación no tiene ayudas del Gobierno foral y “sobrevive con las aportaciones de los asociados”. Eso sí, “los grupos han cumplido con el compromiso que habían adquirido con los ayuntamientos”. En cualquier caso, con dinero o no, “tenemos claro que vamos a seguir actuando y creando, lo que no quita que exijamos lo que es de justicia”. En el ámbito público, sin embargo, sí hay 25 ayuntamientos que apoyan a FTAN. “Una vez finalice el debate será el momento de desarrollar propuestas y proyectos de colaboración con estas instituciones basándose en los criterios que marquen los grupos asociados”, comenta la junta, que será renovada antes del verano, momento en que “quedará definido el presente y futuro” de la entidad, que, a modo de reflexión final, defiende que la participación popular en la cultura “nunca debería ser motivo de desagrado”.