Me escriben para comentarme que las críticas en Extremadura han sido duras para la Lisístrata de Antonio Corencia que se vio también en Olite. He «peinado» Google y me he encontrado algunas perlas. Si encontráis otras, me avisais.

La web «Extremadura al día» titula el estreno de «Decepcionante»:

«Ante más de 3.000 espectadores y veintisiete años después el teatro clásico de Mérida ha revivido la primera producción extremeña del festival Lisístrata, pero no ha logrado ser ni la sombra de lo que fue en aquel entonces. Una renovada Lisístrata, más plana, con un lenguaje vulgar ha sido esta noche una fallida comedia-trágica, convirtiéndose en un triste homenaje para el gran dramaturgo Manuel Martínez Mediero. El espectáculo, dirigido por Antonio Corencia, apenas era entendible, el sonido de los micrófonos no permitían escuchar con claridad los chistes añejos y la multitud de actores parecían deambular por el escenario. A todo esto hay que añadir que los televisivos actores no han estado a la altura y que algunas escenas llegan a ser contraproducentes y dañinas para la figura de la mujer. La obra, original de Aristófanes, narra durante más de dos interminables horas la historia de Lisístrata, interpretada por Miriam Díaz-Aroca. Esta reina de Esparta está cansada de enfrenamientos constantes entre Atenas y Esparta y planea que su marido, el rey Floripón encarnado por Vicente Cuesta (conocido como el padre de Bea la fea) depongan las armas. Para ello, cuenta con la inestimable ayuda de la meretriz Furitis, María Kosty, que logran convencer a las mujeres de ambos bandas para que comiencen una huelga sexual, es decir, que no habrá más sexo hasta que no firmen la paz. Inicialmente, la idea de la abstinencia no es bien recibida, pero con su esfuerzo consigue convencerlas para no satisfacer las necesidades sexuales de sus maridos. Con un público más que generoso a la hora de aplaudir, es compresible que los actores mostrarán su alegría por la respuesta de los asistentes. Vicente Cuesta afirmó estar sorprendido por la reacción del público, que a su juicio, «se ha contagiado en una noche maravillosa». Por su parte, Miriam Díaz-Aroca aseguró que estaba embriagada por el resultado y agradeció el «regalo» que Mérida le ha dado: recibir los aplausos. María Kosty, señaló que «las piedras» le han transmitido una energía maravillosa y que será una noche que siempre llevará en su alma. Finalmente, reconoció que se le ha saltado alguna lágrima por la emoción.
El director de la obra, Antonio Corencia, explicó que estaba contentísimo por la interpretación maravillosa de la compañía y el escritor Manuel Martínez Mediero anunció que ya ha terminado la próxima obra sobre Edipo en las Olimpiadas que se representará dentro de dos o tres años».

La agencia Efe reseña el estreno y no hace valoraciones. Extraigo un fragmento, donde priman los autoelogios del equipo artístico de la obra:

«El espectáculo, que duró más de dos horas entre risas y expectación, recibió los aplausos de las más de 2.500 personas que fueron a ver el estreno de este montaje en Mérida. Al acabar la obra, los actores principales, el director y el dramaturgo extremeño señalaron que las piedras les habían «querido». Corencia aseguró que es una obra propia del teatro «de toda la vida» y destacó que el argumento muestra que «aún queda mucho por hacer por las mujeres porque todavía las matan». Mediero, quien recibió un homenaje antes del comienzo del espectáculo en reconocimiento a su trayectoria profesional y a su labor en Extremadura, señaló que el espectáculo «ha sido posible gracias a la calidad de los actores, que han hecho una representación prodigiosa».
Además, el dramaturgo extremeño anunció que la próxima obra suya que se represente en Mérida será Edipo en las Olimpiadas. Miriam Díaz Aroca dio las gracias a la ciudad de Mérida por el «regalo» que, según dijo, recibió esta noche, sobre todo por la generosidad del público y el reconocimiento al trabajo de la compañía. Cuesta confesó que le sorprendió la reacción del público porque, aunque esperaba que la obra gustara, «no esperaba unos aplausos con tanta fuerza».

Me llega gracias a un lector, cuyo Nick es Kingo, la crítica de Hoy, de Badajoz, que podéis leer entera pinchando aquí. Tampoco tiene desperdicio. Extraigo unos párrafos. La titula «Insípida, inaudible e interminable» y extraigo unos párrafos.
«Hay que ver lo agradecido que es nuestro Teatro Romano de Mérida. Sus espectadores, para ser más exactos. Las compañías que llegan a Extremadura para el Festival no se cansan de mostrar su eterno agradecimiento. Normal. En ocasiones, este público ha disfrutado con espectáculos memorables y actores magistrales, pero, otras veces, ha padecido engendros olvidables con una educación exquisita. En realidad, aguanta todo.
El jueves, en su estreno, a pesar de sus carencias, los aplausos se impusieron a unos mínimos silbidos.
Hace una semana, en el Festival de Teatro de Olite, un colega de la prensa navarra destripó esta ‘Lisístrata’. La calificó como un «timo teatral» y se jactaba de que «las mejores interpretaciones» eran «las de un burro y, sobre todo, la de la cabra». Exageraciones. Podía haber dicho simplemente que resulta decepcionante y que no cumple, de lejos, las expectativas creadas. Y es una pena.
Sólo las actuaciones de José Hervás (el viejo Mirón) y de Vicente Cuesta (Floripón) dejaron momentos interesantes, mientras que a una voluntariosa Miriam Díaz-Aroca, en su primera y seria incursión en el teatro, se le notó demasiado su condición de novata.
Ellos, más de medio centenar de actores secundarios y figurantes, ocuparon la escena del Teatro Romano pero con más presencia física que impacto teatral. Demasiado ruido y pocas nueces.
… Recomiendo su lectura completa.